Paseando entre Palacios por la Ciudad de Ávila II
Comarca: Ávila y Alfoz
Ávila Capital
Continuación Ruta de los Palacios en Ávila I
Extramuros
Saliendo de la muralla por la puerta del Peso de la Harina encontramos dos interesantes edificaciones: la Casa de las Carnicerías, construida a finales del XVI por iniciativa municipal. Adosada a la muralla, es testimonio de la vinculación de ésta al resto de las arquitecturas de la ciudad de Ávila.
La Casa de la Misericordia es conocida por el relieve de su portada como casa del Caballo. Este edificio fue el hospital de San Martín, fundado y dotado por el racionero de la catedral Rodrigo Manso a mediados del siglo XVI.
Extramuros encontramos también construcciones interesantes, como la Casa de los Deanes, en la plaza de Nalvillos, donde está instalado el Museo de Ávila, fundada por Cristóbal y Juan Vázquez de Medina. Esta vivienda constituye un modelo único en la arquitectura abulense, ya que su construcción se aleja de los principios estéticos y de las características del resto de los palacios abulenses.
Muy cerca, en la plaza colindante el Palacio de los Serranos, la casa de Pedro Álvarez Serrano constituye uno de los ejemplos más singulares de la arquitectura doméstica abulense, tanto por el trazado de su planta como por la organización de su fachada. En su interior destaca su interesante patio adintelado del que sólo quedan dos crujías. Ha sido rehabilitado como centro cultural de Caja de Ávila.
Hasta el Colegio de San Gil, hoy ruinas de los Jerónimos y cerca del desaparecido Convento de Santa Catalina, existieron otras casas de la nobleza abulense, aún hoy quedan las portadas de las casas de Vicente Salcedo, de la de Lesquinas, de la de los Guillamas (hoy convento de Adoratrices) y la de Doña Guiomar de Ulloa, todas ellas ejemplos singulares e interesantes. Leer más»
Junto a la Puerta de San Vicente
De nuevo entramos en la ciudad amurallada, en esta ocasión por la puerta de San Vicente, donde Águilas y Bracamonte levantaron sus casas. El primero de ellos está en la plaza de Sofraga, la Casa de Diego del Águila, muy transformada en el siglo XIX.
Frente a ella la Casa de Suero del Águila o Palacio de los Verdugo, construida en lo esencial entre 1500 y 1530 es una de las viviendas más interesantes de Ávila; su portada perfilada con el cordón de San Francisco, la decoración de grutescos de la ventana principal indican la presencia de un lenguaje plateresco en la ciudad. De gran interés son su patio inacabado y el artesonado de la escalera.
Muy cerca la Casa de Miguel del Águila, que fue cedida al Estado por su última propietaria, Doña Luisa de Narváez, duquesa de Valencia, y tras la intervención que se está realizando en la misma va a convertirse en un anexo del Museo del Prado. Su construcción data de mediados del siglo XVI.
En la plaza de Fuente el Sol, la Casa de los Águila y Bracamonte, que puede fecharse a mediados del XVI y de la que se ha conservado su fachada, similar a la de la casa de Pedro Álvarez Serrano y la Casa de Diego de Bracamonte, de Álvaro Dávila, mariscal de Castilla y cabeza de la familia de los Bracamonte. El estado de ruina del edificio a principios del siglo XX y las necesarias obras llevadas a cabo en el mismo han sido la causa de que se haya perdido parte de su estructura original. Leer más»
Otros palacios de interés son el Palacio de Juan Henao, hoy Parador de Turismo. De él se conservan la portada primitiva, transformada en ventana y la estructura de su patio, aunque este fue rehecho hacia 1922. El palacio original debe datarse a mediados del XVI.
Una de las construcciones más sobresalientes de la ciudad es el Palacio de Polentinos o casa de Contreras, situado en la calle Vallespín. Su arquitectura nos habla de los maestros que en el primer cuarto del siglo XVI trabajan en Ávila incorporando un lenguaje plateresco en la ornamentación de su portada con motivos militares y en los dinteles con medallones de su patio. La restauración del palacio a finales del siglo XIX, cuando se instaló la Academia de Intendencia, convierte a esta casa en un referente obligado para el estudio de la arquitectura abulense. Hoy es Archivo Militar del Ejército.
De obligada visita en nuestra ruta es el palacio que los Reyes Católicos mandaron edificar en el Real Monasterio de Santo Tomás.
Está integrado en el conjunto monástico pero mantiene dentro del mismo su independencia y personalidad. La razón de la incorporación de una casa real en el recinto del convento debe relacionarse con el carácter itinerante de la monarquía y con la estrecha vinculación desde el principio de la Edad Media entre el monacato y la corona.
La construcción contaba con todas las dependencias necesarias para el establecimiento temporal de la corte. Se desarrolla en torno al claustro de los reyes y tenía entrada independiente, situada en el ángulo nordeste.
Es un buen ejemplo de la arquitectura de fines del siglo XV y principios del XVI, en la que se aúnan de forma armoniosa el último gótico y el mudéjar, siendo por lo tanto un claro reflejo de la historia y sociedad de su tiempo. Hoy en el palacio se ha instalado un interesante Museo de Arte Oriental.
Palacios en Ávila
