Datos básicos del sendero:
- Distancia: 14,9 km
- Tiempo estimado: 3 h 30 min
- Punto de salida: Arauzo de Salce
- Desnivel acumulado: 235 m
- Dificultad: Media
- Ciclabilidad: 100%
- Época recomendada: Todo el año
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SENDERO DE LOS ARABUZOS PRC-BU 154 - SENDERISMO RIBERA DEL DUERO BURGOS
Comarca: Ribera del Duero
Arauzo de Salce - Arauzo de Torre
Arauzo se escribía 'Arabuzo' en el siglo XII, al caracterizarse este siglo, fonéticamente, por la vacilación entre la 'b' y la 'u'. Arauzo de Torre debe su nombre a que poco después de su refundación se elevó una torre guerrera sobre un caserío.
Arauzo de Salce hace referencia al sauce, existiendo constancia documental de que abundaba esta especie en la comarca; sin embargo, fueron en su mayoría cortados en el s. XIV porque se creía que eran perjudiciales para la salud de sus gentes.
El itinerario parte de Arauzo de Salce. En esta localidad de La Ribera cabe destacar los retablos de su iglesia parroquial y la presencia de ciertos árboles singulares como el moral de Salce, ubicado junto a la iglesia, donde se puede picotear alguna mora si se escoge la época del año acertada, o el roble de San Miguel, un quejigo que se alza en el punto donde antiguamente existía una ermita dedicada al arcángel de dicho nombre.
Desde el pueblo hay que cruzar el río Aranzuelo para así tomar el camino de la Vega, que marcará el inicio de la ruta. Unos metros después se gira a la derecha para rodear una balsa de riego y desembocar en el camino de Sinovas. Nos llamará la atención el intenso tono rojizo que presenta la tierra revelando su alto contenido en hierro.
El paisaje agrícola va dejando paso a una masa forestal cada vez más densa, donde la sabina es la especie principal, pudiéndose observar ejemplares de bello porte que harán disfrutar de la ruta bajo sus copas. Si se continúa por la senda marcada se llega a un cortafuegos que se tendrá que recorrer unos metros en dirección Este.
Es posible que los más afortunados puedan deleitarse con la presencia de algún pequeño mamífero, o sorprendan a algún ave que se alzará en vuelo ante tal irrupción, como una abubilla, un azor o tal vez un águila calzada, característica de esta zona.
A la altura del cruce, que se localiza más adelante, habrá que tomar el desvío a la derecha girando nuevamente en esta dirección unos metros después, para adentrarnos en un bosque denso de encinas que nos escoltarán durante el recorrido, flanqueando el camino.
Continuando la senda, se toma en el momento de la bifurcación la ruta de la izquierda y será, al final de este tramo, cuando se desemboque en la Cañada Real Segoviana, antigua vía pecuaria que comunicaba las provincias de Burgos y Badajoz y que tras el abandono de la trashumancia se ha convertido en un práctico corredor natural de 75 m de ancho, donde las encinas y las sabinas, principalmente, acompañan a los caminantes ofreciendo su sombra.
Se seguirá la cañada hasta el encuentro con el camino de Santo Domingo, trayecto que se prolonga varios kilómetros y durante el cuál se verá como se va transformando el paisaje, al ir abandonando la masa forestal para recuperar la imagen de los campos cerealistas que tanto caracterizan a Castilla.
Este tramo llevará directamente a la localidad de Arauzo de Torre, pueblo que cuenta con importantes restos celtas y romanos que señalan su procedencia como poblado romanizado. De ahí la presencia de una de las pocas fuentes romanas que se conservan en la provincia de Burgos y restos de vías romanas. También conserva un castro indígena y estelas funerarias medievales.
Tras el paseo por este núcleo urbano se retoma el sendero por el camino de la Vega que transcurre, como su nombre indica, paralelo al curso del río. Se trata del último trecho del recorrido, siguiendo el trazado que marca el Aranzuelo, con vistas a peña Cervera y El Cerro y divisando en la cercanía el municipio de Arauzo de Salce, donde podremos recuperarnos del esfuerzo realizado.
Información: Ribera del Duero Burgalesa
